COBERTURA INFORMATIVA SOBRE PANDEMIAS (LXXXIX): MODELOS
DE CONVIVENCIA CON LA COVID-19 (73), publicado en Nordesía, dominical Diario de Ferrol, el día 19 de diciembre 2021
Carlos Piñeiro Diaz, médico de familia. Magister en Salud
Pública. Divulgador científico
La sociedad ha aprendido a
convivir con la COVID-19, tras haber pasado un período de confinamiento y haber
adoptado medidas como el uso de las mascarillas, el distanciamiento físico y el
lavado de manos, pero no parece suficiente. Nuevos modelos de convivencia se
han convertido en reto, incluso limitándose derechos básicos con el objetivo de
controlar la enfermedad. Se incrementa la sexta ola y el debate sobre las
restricciones se acentúa.
La prestigiosa revista
científica “The New England Journal of Medicine” ha publicado recientemente un
artículo original sobre la experiencia del ministerio de salud israelí, cuando
aprobó el uso de una tercera dosis de vacuna BNT162b2 , o refuerzo, en julio de
2021, con personas que habían recibido las dos dosis 5 meses antes y a partir
de los 50 años de edad, comparado con un grupo que no había recibido el
refuerzo. Se observó que la mortalidad de la COVID-19 se redujo en un 90%
gracias a la tercera dosis. En España acaba de aprobarse la aplicación de la
dosis de refuerzo a partir de los 40 años y a los trabajadores esenciales.
El desarrollo de las
vacunas de ARN mensajero ya sea BNT162b2 (Pfizer - BioNTech) o ARNm-1273
(Moderna), ha modificado el pronóstico de las formas graves de COVID-19 y ha
reducido la mortalidad atribuible a ellas. La variante delta del virus provocó
una nueva situación mundial agravada y que muestra la necesaria modificación de
las pautas de vacunación. Las expectativas ante la variante ómicron de rápida contagiosidad,
parecen exigir una tercera dosis de refuerzo para aumentar su eficacia.
A nivel mundial se observa
una disminución de casos y muertes en las dos últimas semanas. Los datos
oficiales de la OMS (Organización Mundial de la Salud) resultan sobrecogedores,
con cerca de 269 millones de casos confirmados y casi 5,3 millones de muertes
en todo el mundo. Resulta poco reconfortante pensar el elevado número de
personas que podrían haber salvado su vida si en todo el planeta las vacunas
fueran aplicadas con regularidad.
El debate sobre las restricciones,
ante la proximidad de la Navidad, se acentúa. Varios países han introducido el
pase de salud obligatorio para acceder a muchas áreas de la vida cotidiana y
para viajes internacionales. El objetivo podría ser diferente según el contexto
específico de cada país: mejorar la tasa de detección durante una escasez de
vacunas (Dinamarca), aumentar la cobertura de vacunación (Italia, Francia) y /
o responder a un aumento de la incidencia (Francia, Alemania, Bélgica). Alemania
se está convirtiendo al pase de vacunas. Ante una situación de salud cada
vez más degradada (más de 300 muertes al día), muchos Lander han decidido
prohibir el acceso a lugares públicos a personas no vacunadas, testeadas o
no. Los alemanes adultos, ni vacunados ni curados de Covid-19 ya no pueden
ir a cafés, restaurantes, cines, gimnasios, etc. Si, por tanto, los no
vacunados se ven privados de actividades culturales o de ocio, también se les
prohíben otros pasatiempos mucho menos agradables.
En una carta al editor de la revista científica The Lancet ,
Günter Kampf (Alemania) protesta contra el estigma de los no vacunados contra
Covid-19. Las declaraciones de ciertos líderes políticos de Estados Unidos
y de Europa que evocaron una "pandemia de personas no vacunadas" atribuyéndoles
en parte, o incluso en su totalidad, la perpetuación de estas últimas,
despertaron particularmente su ira. La frase: "el no vacunado amenaza
al vacunado" es, para él, una visión totalmente simplista de la situación
epidemiológica actual. En Alemania, el autor informa que el 55,4% de las formas
sintomáticas de la enfermedad en pacientes de 60 años o más ocurren a pesar de
la vacunación completa, una proporción que continúa aumentando a lo largo de
las semanas. Temporalmente protegidos contra las formas severas de Covid-19,
los vacunados son, no obstante, capaces de transmitir el virus cuando padecen
una forma sintomática o asintomática de la infección. No se justifica
estigmatizar al no vacunado, según el autor. El debate entre epidemiólogos y científicos
está presente, porque en el fondo se empieza a plantear la obligatoriedad de la
vacunación en muchos países. Es conveniente insistir en la distancia social, el
uso de la mascarilla y la higiene adecuada.
La incidencia media de
casos se ha incrementado en España, con riesgos medio y extremo según las
comunidades autónomas. La tasa de incidencia media, en 14 días, es superior a
500 por 100.000 habitantes. En Galicia se superan los 14.000 casos activos por
coronavirus, con una incidencia acumulada a 14 días de 407,4 casos por 100.000
habitantes, bajando el número de ingresos en UCI.
En Galicia el certificado
de vacunación COVID-19 se impone en determinadas circunstancias durante estas
fechas y avalado por el Tribunal Superior de Xustiza gallego. La Xunta de
Galicia puede exigir el certificado para acceder a centros sociosanitarios,
residencias de mayores y de personas con diversidad funcional, a instalaciones
cerradas en las que se practique la actividad física y deportiva no federada,
las piscinas cubiertas y a eventos multitudinarios o a aquellos que tengan
autorizada la venta de alimentos o bebidas para el consumo en su interior.
Los jueces destacan que el
hecho de que el certificado no elimine completamente la posibilidad de nuevos
contagios sí reduce el riesgo de transmisión del virus, por lo que entienden
que la medida es adecuada, porque se implementa en respuesta a indicios
racionales que ponen de manifiesto la existencia de un peligro para la salud de
la población.