CONSUMO DE ALCOHOL Y SALUD DIARIO DE FERROL Suplemento Dominical Diario de Ferrol del 16.02.2020. Pg.8-36
CONSUMO DE ALCOHOL
Y SALUD
Carlos Piñeiro
Diaz, médico centro de salud de Narón. Magister Salud Pública
Según el Programa de
Actividades de Prevención y Promoción de la Salud, de la Sociedad Española de
Medicina de Familia y Comunitaria, el alcohol se relaciona con más de 60
enfermedades y es responsable directo del 10% de muertes directas en varones.
En España, el consumo tradicional del alcohol es casi diario, exige una mayor
atención de las autoridades sanitarias.
El alcohol es una
sustancia psicoactiva, con propiedades tóxicas que producen dependencia, que se
consume en todo el mundo. Más de dos mil millones de personas, o
aproximadamente tres de cada diez individuos, son bebedores actuales a nivel
mundial. En muchos países, el consumo de alcohol está fuertemente arraigado en
las normas y tradiciones culturales, lo que a menudo lleva a pasar por alto sus
daños sociales y de salud.
La inclusión de un
objetivo de salud para fortalecer la prevención y el tratamiento de los
trastornos por uso de sustancias se encuentra en la agenda de los Objetivos de
Desarrollo Sostenible 2030 (ODS 2030) y es un poderosos reconocimiento de estos
efectos negativos del consumo de alcohol. Por lo que, la evidencia científica
es fundamental para identificar formas de trabajar hacia el cumplimiento de los
objetivos de 2030. Existen innumerables publicaciones sobre las bondades del
consumo de alcohol, que habrá que poner en duda y contraponerse a los intereses
de la industria del alcohol.
Un estudio publicado
en The Lancet, revista médica británica de gran prestigio internacional, que
recoge la mayor base de evidencia científica hasta la fecha, ha concluido que
no hay un nivel seguro de consumo de alcohol. De hecho, ha demostrado que casi
3 millones de muertes en todo el mundo, durante el año 2016, se atribuyeron a
su consumo, incluido el 12% de las muertes en hombres de entre 15 y 49 años.
Se considera que los
riesgos para la salud, asociados al alcohol, son grandes. Los hallazgos del
estudio del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud, de la Universidad
de Washington (Estados Unidos), dirigido por la doctora Emmanuela Gakidou,
encontraron correlaciones claras y convincentes entre beber y la muerte
prematura, el cáncer y los problemas cardiovasculares. La investigación no
distingue entre cerveza, vino y otras bebidas alcohólicas, debido a la falta de
evidencia al estimar la carga de la enfermedad. Utilizando los datos sobre
todas las muertes relacionadas con el alcohol en general y los resultados de
salud para determinar sus conclusiones. El consumo cero de alcohol, minimiza el
riesgo de pérdida de salud.
Según The Lancet, el
consumo mundial de alcohol por persona aumentó de 5,9 litros de alcohol puro en
el año 1990, a 6,5 en 2017, y se prevé que siga aumentando hasta alcanzar los
7,6 en 2030, según un estudio internacional realizado en 189 países. Sus
estimaciones sugieren que para el año 2030, la mitad de todos los adultos
beberán alcohol, y casi una cuarta parte (23%) tomará esta sustancia en exceso,
al menos una vez al mes. Los investigadores achacan estas cifras al aumento del
consumo en países de ingresos bajos y medios, a medida que se hacen más ricos,
así como al crecimiento de la población mundial.
El consumo de alcohol
afecta al aparato cardiovascular. El consumo regular y moderado de alcohol (un
promedio de catorce consumiciones por semana) se considera como un factor de
riesgo modificable para la fibrilación auricular (arritmia cardiaca). Las
modificaciones del estilo de vida, como la abstinencia, reduce la fibrilación
auricular. La recomendación de que una o dos consumiciones alcohólicas al día,
podrían proteger frente al ictus ( problema cerebrovascular), ha quedado
descartada completamente. Se sabía que los ictus aumentaban con el excesivo
consumo de alcohol, pero no se sabía si aumentaban o disminuían con el consumo
moderado. La evidencia genética, refuta que el consumo moderado de alcohol es
protector.
Investigadores de la
Universidad Autónoma de Madrid, concluyen tras un estudio de seguimiento de
consumo de alcohol, a lo largo de la vida, no hubo diferencias en la mortalidad
entre los participantes que no bebían nada y los que bebían cantidades
moderadas de alcohol, esto es hasta tres copas al día en hombres y hasta dos
copas al día en mujeres. Pero la mortalidad era el doble entre los bebedores de
cantidades mayores, que el de los no bebedores.
Abandonar
completamente el alcohol, mejora la calidad de vida relacionada con la salud de
las mujeres, especialmente su buena salud mental, según un estudio realizado en
la Universidad de Hong Kong, en la Escuela de Salud Pública y del Laboratorio
Estatal Clave de Cerebro y Ciencia Cognitiva.
Las madres que
consumen niveles de alcohol moderados o altos durante el embarazo, podrían
estar cambiando el ADN de sus hijos, según un estudio de la Universidad de
Rutgers (Estados Unidos). La exposición prenatal al alcohol en niñas y niños,
pueden provocar trastornos del espectro alcohólico fetal, incluyendo
discapacidades físicas o intelectuales, así como problemas de comportamiento o
aprendizaje.
El alcohol, es la sustancia psicoactiva
consumida de forma más generalizada entre los adolescentes españoles de 14 a 18
años, población que en un 76% ha consumido alcohol en alguna ocasión en el
último año, y más del 60% en el último mes. Unos 700.000 beben cinco o más
copas o cañas en menos de dos horas, los fines de semana.
Observando las
evidencias científicas, es exigible una mayor atención de las autoridades
sanitarias respecto al consumo de alcohol. El consumo cero de alcohol es la
mejor medida para preservar la salud de la población.